El Real Madrid sigue monitoreando de cerca el mercado de fichajes con el objetivo de fortalecer su defensa, especialmente tras las recurrentes lesiones de David Alaba y Éder Militão esta temporada. A pesar de los rumores y especulaciones, el club merengue no realizó ningún movimiento significativo en el mercado de invierno, enfocándose en posibles incorporaciones para el próximo verano, especialmente si se concreta la salida de Nacho Fernández.
Uno de los nombres que ha captado la atención del Real Madrid es Antonio Silva, el joven central del Benfica. Su desempeño sobresaliente en el club portugués no solo ha despertado el interés de los blancos, sino también de gigantes europeos como Liverpool, Bayern de Múnich y Manchester United. Esta competencia ha llevado al Benfica a establecer un precio de salida considerablemente alto para Silva, fijándolo en 100 millones de euros.
El elevado precio de Antonio Silva ha llevado al Real Madrid a reconsiderar su interés por el jugador, relegándolo a un segundo plano mientras evalúan otras opciones en el mercado. La dirección deportiva del club está consciente de la necesidad de reforzar la defensa con jugadores de calidad, pero también busca mantener un equilibrio financiero en sus operaciones.
Buscando alternativas
Con la ventana de transferencias de verano en el horizonte, el Real Madrid continúa explorando diversas alternativas para mejorar su plantilla defensiva. Los próximos meses serán cruciales para determinar qué jugadores podrían llegar al Santiago Bernabéu, ya que el club busca soluciones que no solo aporten solidez defensiva, sino también una inversión económica prudente.