Si hace unos días hicimos repaso de algunos de los peores fichajes del Real Madrid a lo largo de los últimos años, hoy es el momento de detallar algunos de los aciertos que ha tenido el club blanco cuando se ha visto forzado a reforzar su plantilla a mitad de temporada.
-Lass Diarra
En medio de una crisis sin precedentes en el Santiago Bernabéu, el futbolista francés llegó al Real Madrid al mismo tiempo que el delantero holandés Klaas Jan Huntelaar, pudiendo inscribir únicamente a uno de ellos en la lista de Champions. Estuvo tres temporadas y media en el Real Madrid, siendo Lass un jugador que habitualmente fue titular a las órdenes de José Mourinho.
-Diego López
Criado en las categorías inferiores del Real Madrid y teniendo que salir posteriormente, el portero gallego tuvo su gran oportunidad a los 31 años, llegando procedente del Sevilla a cambio de 3,5 millones de euros. Queda en el recuerdo la decisión del ya mencionado Mourinho de darle la titularidad por delante de Iker Casillas, en un debate que se mantuvo durante bastante tiempo, disputando el guardameta 61 partidos antes de poner rumbo al AC Milan y posteriormente al Espanyol, donde continúa jugando a día de hoy.
-Marcelo
En enero de 2007, el lateral zurdo llegó procedente del Fluminense con tan solo 18 años, siendo uno de los futbolistas más prometedores de su país. Tras unos inicios nada sencillos, el jugador carioca logró hacerse con la titularidad indiscutible en los mejores tiempos de la historia reciente del club blanco, superando incluso para muchos lo conseguido por su antecesor, el histórico Roberto Carlos.
-Gonzalo Higuaín
El delantero argentino aterrizó también en 2007 en el Real Madrid procedente de River Plate a cambio de 12 millones de euros. Desde el primer día, su compromiso con el club fue ejemplar, a pesar de ser seriamente criticado por su falta de gol en las grandes citas, así como por la competencia que mantuvo hasta el último día con Karim Benzema. Pese a todo, es uno de los máximos goleadores de la historia del Real Madrid en los seis años en los que vistió la camiseta blanca.