Peña Sevillista "Amigos del Atalanta"

Era un secreto a voces que el Sevilla, y el sevillismo, estaban deseando la vuelta de Monchi para así poder soltar los lastres que los anteriores "directores deportivos" habían colado al equipo hispalense. Desde Muriel a Amadou, pasando por Roque Mesa, la limpia que ha sufrido el cuadro rojiblanco ha sido una de las más grandes de su historia, con hasta 13 bajas sumadas a los tres jugadores que estuvieron cedidos la pasada campaña.

De todos los jugadores que han salido de la capital andaluza, la mayoría en calidad de cedidos, dos han sido especialmente celebrados por la afición sevillista: Luis Muriel y Guilherme Arana. El delantero cafetero llegó de la Sampdoria promediando números de infarto y estaba destinado a ser "el nuevo Carlos Bacca" llegando a ser titular por delante de Ben Yedder, ironías de la vida. Finalmente se demostró que su mala forma física y su falta de ritmo no eran suficientes para jugar en España, por lo que el año pasado se marchó cedido a la Fiorentina y este año finalmente ha sido vendido al Atalanta. 14 millones por un jugador que costó 20, en su momento fue de los más caros de la historia del club, y que no ha dejado grandes noches para el recuerdo. Por otro lado, Arana ha salido en calidad de cedido en dirección al mismo destino que Muriel. El Atalanta se ha convertido para la afición sevillista en un equipo hermano, gracias a los grandes favores que está realizando este verano. El lateral izquierdo costó cerca de 11 millones, y el club italiano se hará cargo de la ficha durante toda la temporada, además de pagar un millón al Sevilla por la cesión y tener una opción de compra, no obligatoria, de 9 millones.

Cuando la cosa parecía que no podía ir a mejor, el nuevo mejor amigo de Monchi, el director deportivo del Atalanta, afirma que van a rescindir el contrato a Skrtel ya que no cumple las condiciones físicas para jugar en el equipo. Al León de San Fernando se le encendieron los ojos en ese momento y llamó ofreciéndole al club italiano un recambio. Un central alto, rubio y simpático; que fuera el héroe del Slavia de Praga la pasada temporada en Europa League, cuando no fue capaz de despejar un balón que se colaba lentamente hacia la portería de Vaclik. Según informa Di Marzio, y no se suele equivocar, los italianos estarían dispuestos a llevarse al danés cedido por una temporada, y el jugador vería con buenos ojos disputar la Champions en el club de Bérgamo. Con ello, Lopetegui se libraría de otro descarte y el Sevilla tendría una plaza libre en la lista A de Europa League, en un hueco que podría ocupar en las próximas horas Chicharito Hernández.

Tres jugadores apestados por la afición y descartados por su entrenador que han encontrado hueco en un club que va a disputar la Champions y, si Dios quiere, donde se quedarán a vivir felices sus vidas. Esto sumado a la posible cesión de Sergio Rico al PSG, la venganza por Sirigú se ha servido en un plato muy frío, y las llegadas de Chicharito y Bono dejan al Sevilla con una plantilla bastante competente y que podría optar a todo. Gracias, claro está, al Atalanta.