Una lesión grave en pleno desarrollo de una temporada es una de las peores noticias que puede golpear a un club, como ha sucedido en este caso con el Tottenham y la lesión de hombro del guardameta galo, Hugo Lloris. Algo mucho peor que una derrota, eso seguro, ya que trastoca una planificación y la compensación de una plantilla concienzudamente maquinada durante todo un verano. Más aún, si afecta a una posición tan delicada como la portería, sobre todo para un club como el Tottenham que no pasa por su mejor momento y que pierde varios meses a uno de los mejores porteros del mundo.
La cruda realidad es que los pupilos de Mauricio Pochettino no podrán contar con Hugo Lloris, top-5 de los mejores porteros del planeta y jugador insignia del club londinense, hasta comienzos de 2020 como mínimo. A pesar de que las pruebas realizadas al portero francés descartaron la cirugía, los ligamentos de su hombro izquierdo sufrieron un importante revés que ha dejado coja la portería de los Spurs.
Con la única presencia fiable de Paulo Gazzaniga bajo los palos, la necesidad de los británicos de acudir a la agencia libre se tornó irrefutable y eso es lo que han hecho desde las oficinas del norte de Londres. El elegido para intentar tapar todo lo posible el enorme hueco generado por la lesión de Hugo Lloris no es otro que Michel Vorm, un ex jugador del Tottenham que tuvo contrato vigente con el club hasta junio de este mismo año, y que ahora ha vuelto a firmar un nuevo acuerdo hasta junio de 2020 tras su estancia varios meses como 'free-agent'.
El holandés llegó en 2014 al Tottenham procedente del Swansea por casi 6 millones de libras, tras firmar en la Premier League su mejor campaña como profesional. Disputó 47 encuentros con la camiseta de los Spurs, en un total de 4 temporadas, ejerciendo un claro papel suplente, precisamente por detrás de un Hugo Lloris al que ahora tiene la misión de suplir con la mayor de las garantías posibles por el bien de los aficionados ingleses.